Pinamar está implantada en lo que a principios del siglo XIX se denominaba "Montes Grandes de Juancho", veintiocho leguas que pertenecieron a Don José Suárez.
Estos campos, según la cronología histórica, fueron del General Félix de Álzaga, quien los recibió de Juan Manuel de Rosas por haber sido Jefe del regimiento "El Restaurador". Muerto don Félix, los heredó Martín de Álzaga, quien se casó con Felicitas Guerrero, que en 1870 murió de manera trágica, víctima de un drama pasional. Al no tener descendencia, las tierras pasan a ser propiedad de su padre, Don Carlos Guerrero y a la muerte de éste y de su esposa, Doña Felicitas Cueto, heredan estos campos los siete hijos del matrimonio quienes ser reparten las tierras.
De esta subdivisión, realizada en 1886, los veinticinco kilómetros de playas y médanos costeros quedan divididos entre las
Estancias "Martín García", "La Invernada", "El Rosario" y
"Manantiales", propiedad de
Manuel y Enrique Guerrero.
El 12 de noviembre de 1907, el Señor Enrique Guerrero es designado por el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires Comisionado Municipal para el pueblo "Divisadero".
En 1908 el Gobierno Provincial declara a este pueblo cabecera del "Partido del Tuyú". Corría ese año cuando el Ferrocarril del Sud habilita, en los campos de José Guerrero, una estación denominada "Juancho", que más tarde sería aprovechada para transportar a los turistas a estas playas.
En 1910, una ley de fecha 8 de agosto dispuso cambiar el nombre del Partido del Tuyú por el de "Juan Madariaga". Poco antes, en 1908, los belgas Fernando Robette y Agustín Poli llegan a estas tierras con la idea de instalar un balneario en la costa, similar al de su lugar natal, "Ostende". Mientras los belgas Robette y Poli se dedicaban a Ostende, en el año 1909 los ingenieros franceses Francois de Roumefort, Albert Grouward y A.Bisset, le compran a José Guerrero su fracción de la costa para crear según los planos otro balneario modelo.
En 1912 se aprueban los planos de subdivisión con un proyecto urbanístico de avanzada. El trazado es totalmente independiente de la topografía y conforma un dibujo en cuadrícula de menor jerarquía urbanística que el de Ostende. Aquella "Villa Atlántica", como se la llamó entonces, sigue hoy esperando que se cristalice la idea de sus creadores. Actualmente recibe el nombre de "Montecarlo", una localidad del Partido de Pinamar que duerme entre tantos otros proyectos que se fueron sucediendo luego. Uno de ellos, en la década de los 70, fue el de construir en ese lugar el puerto de "aguas profundas" del litoral marítimo bonaerense.
En 1918,
Doña Valeria Cárdenas de Russo, con la ayuda del
Arquitecto Jorge Bunge, decide forestar parte de sus campos sobre la costa. Un año después ambos firman un convenio, en el cual Bunge paga la cantidad de $ 41.000 por 2.684 hectáreas y se estipula que tendría la mayoría de las acciones en tanto que la Sra. de Guerrero recuperaría las dunas en caso de que la obra fracasara.
En 1941 comienza la fijación y la forestación. Fue un año de muchas lluvias, circunstancia que favoreció la plantación. En 1942 queda jurídicamente constituida la sociedad entre el Arquitecto Bunge y la Sra. Valeria Guerrero Cárdenas de Russo, uniéndose a ellos un grupo importante de profesionales y hacendados. Pensando en el bosque de su creación (en su mayoría pinos) y en el mar, deciden asignar el nombre de "Pinamar" a este balneario.
En 1942 se construyó un pequeño hotel que se llamó "Pinamar", que fue ampliado en 1945 y que en la actualidad es el "Playas Hotel".
La primera casa de verano, propiedad de la familia Fariní, denominada "Marejada", aún se levanta en la esquina de las calles Del Tuyú y Del Odiseo con su fachada original.
El 14 de febrero de 1943 Pinamar se inaugura como localidad balnearia y al año siguiente, el Poder Ejecutivo Provincial aprueba el Plan Director, creación del Arquitecto Jorge Bunge, el cual fue la guía para construir y urbanizar, respetando la topografía.
En el verano de 1947/1948 don Herman Parini inició un servicio de transporte de pasajeros con la empresa "Al Mar". Esta línea pasa a ser luego la compañía "Sol Mar".
Mientras tanto, hacia el año 1947, Doña. Valeria Guerrero Cárdenas de Russo, viendo que probablemente los reclamos de sus derechos como participante del convenio firmado con el Arq. Bunge en la creación de Pinamar no serían atendidos, decide crear su propio balneario en las tierras que aún le quedaban sobre el litoral marítimo, lo que actualmente es Valeria del Mar. Para ello se crea una Sociedad, "Balnearios del Atlántico S.A.", que con gran entusiasmo inicia la forestación y el loteo. El primer edificio construido en Valeria del Mar se llama "Del Atlántico" y se inaugura en 1962.
En 1949, ante la amenaza de levantamiento de la red ferroviaria y por reiterados pedidos, se reinaugura el recorrido de la vía del ferrocarril que fuera utilizada en 1914 para llevar leña, pero que ahora serviría para transportar no solamente los elementos necesarios para los trabajos de forestación sino que también cumpliría el servicio de transporte de pasajeros.
Entre los años 1949 y 1953 se comienzan a radicar en Pinamar grupos de familias de inmigrantes italianos que llegan al país al finalizar la segunda gran guerra.
Con gran afán de progreso le dan a Pinamar el aporte de su etapa inicial. En ese período se comienza a organizar la sociedad estable y se forman las distintas comisiones de diversas instituciones que hoy cumplen el importante rol para el que fueron creadas. Surgen así el Club de Pesca, la Sociedad de Fomento, la Comisión Pro-Templo, etc. Además Pinamar S.A. dona las tierras para la construcción de la Escuela Primaria, que funcionaba en la administración de dicha firma y para Salud Pública. Así se levanta primero la Unidad Sanitaria, que más adelante -en 1977- se transformó en la Cooperativa Unidad Sanitaria Pinamar Ltda. (CUSPIN Ltda.) y que actualmente ocupa esas instalaciones el Hospital Comunitario de Pinamar.
El 13 de agosto de 1961 muere Don Jorge Bunge, creador de este paraíso, quien aplicando conocimientos de urbanismo adelantados para aquella época, genera lo que hoy es el ejido de
nuestra ciudad, admirada por miles de turistas que llegan buscando el contacto con la naturaleza.
En 1962 se concreta la creación de la Cooperativa Telefónica de Pinamar (TELPIN Ltda.) por Don Enrique T. Susini, que es pionera en sus servicios de telefonía y adelantada por décadas al resto del país. Telpin sigue siendo hoy orgullo de los pinamarenses y asombro de sus visitantes. En la década del 70 se produce un desarrollo relevante en la construcción, surgiendo las residencias multifamiliares.
El 1º de julio de 1978, se crea el "Municipio Urbano de Pinamar", que abarca parte del territorio perteneciente al partido de Gral. Juan Madariaga. A partir de esa fecha, las localidades de Montecarlo, Pinamar, Mar de Ostende, Ostende, Valeria del Mar y Cariló forman el Municipio de Pinamar, y conforman un Centro Productor de Servicios que están relacionados directa o indirectamente con la actividad turística.
La localidad de Pinamar pasa a ser cabecera del Partido y con fecha 23 de mayo de 1983, se sustituye la denominación de "Municipio Urbano de Pinamar por la de "Partido de Pinamar".
El 7 de diciembre de 1996 llega nuevamente el tren a la Estación Divisadero de Pinamar, en Gral Madariaga, a 500 metros de la ruta N° 11.